Recomiendo disfrutar del bello entorno natural mientras paseas junto al lago y observas la vida silvestre, como patos y cisnes que son encantadores.

La atención de Laura fue excepcional, siempre cuidando los detalles y haciendo que nos sintiéramos como en casa. Sin embargo, la falta de un servicio de bar obliga a salir para comer y cenar.

La atención de Laura fue excepcional y acogedora.

Vamos al grano, lo bueno y lo malo

Un pequeño paraíso en medio del campo. Las habitaciones son auténticos bungalows, y la atención del personal es excepcional. Ideal para desconectar y disfrutar de la tranquilidad. El spa tiene vistas espectaculares al campo, y las instalaciones están muy bien cuidadas. Solo desearía más opciones para comer en el lugar.

satisfacción con detalles importantes

La atención de Laura fue excepcional. siempre amable y preocupada por nuestro bienestar, nos hizo sentir como en casa. Además, disfrutamos del spa con sus vistas surrealistas, un verdadero oasis de tranquilidad. Las vistas al lago desde la habitación fueron un espectáculo que no esperaba y que hizo nuestra estancia aún más especial.

Sin embargo, la falta de opciones de comida en el lugar puede ser un inconveniente.

La atención del personal es excepcional, haciéndote sentir como en casa y siempre preocupados por tu bienestar.

La falta de un servicio de bar o restaurante limita las opciones para cenar después de un día de turismo.

Maravilloso refugio, ideal si deseas disfrutar de la tranquilidad mientras paseas por sus más de doscientas hectáreas de hermosos paisajes árboles.

Finca El Cortiñal es un auténtico refugio en la naturaleza, con más de doscientas hectáreas para explorar. Las habitaciones son como bungalows abrazándote con su calidez y ofreciendo vistas al lago que dejan sin aliento.

Opciones de comida limitadas.

Este lugar se adapta perfectamente a mis necesidades. Ofrece Wi-Fi, aparcamiento gratuito, un jacuzzi y un bar/lounge. Recuerdo que en mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar algo perdido. ¡Recomiendo disfrutar de los desayunos! Regreso para un viaje de negocios.

La finca cuenta con suites individuales que son auténticos bungalows, todos con vistas a la naturaleza. Las instalaciones incluyen un spa y salones lounge donde puedes relajarte, además de una ruta de senderismo en más de doscientas hectáreas de alcornoques que es sencillamente impresionante.

No disponen de servicio de bar ni restaurante, lo que te obliga a salir para comer y cenar, especialmente cansado después de un día de turismo. La piscina es pequeña y el área de madera que la rodea está en mal estado, con tablas sueltas que pueden ser peligrosas descalzo. Falta un aire acondicionado en las suites, solo hay ventiladores de techo, lo cual puede no ser suficiente en los días más calurosos.

El paisaje es espectacular, con vistas al lago que son un verdadero deleite. Las habitaciones están bien decoradas y son muy acogedoras, ideales para desconectar y disfrutar de la tranquilidad.

Sin embargo, la falta de un servicio de restaurant puede ser incómoda, ya que deben salir para comer y cenar. También, el suelo de madera cruje bastante al moverse por la habitación, lo que puede ser molesto.

Pasamos tres noches inolvidables. La habitación era perfecta, espaciosa y con vistas al lago que nos dejaron sin aliento. La atención de Laura fue excepcional. su amabilidad nos hizo sentir como en casa. La biblioteca es increíble y muy acogedora donde disfrutamos de varios momentos de relajación.

La habitación que tuvimos era genial, super espaciosa y calentita. La cama era de esas que te abrazan. dormí como un bebé. Las vistas al lago desde la habitación son simplemente espectaculares. Aunque el suelo de madera crujía un poco cuando te movías, a mí no me molestó tanto. La atención de Laura hizo que nos sintiéramos como en casa, se nota que le importa la experiencia de los huéspedes.

Un refugio de tranquilidad y naturaleza

Pasamos un fin de semana increíble, disfrutando de la paz que ofrece este lugar. Las habitaciones son auténticos bungalows muy bien decorados, y las vistas al lago son espectaculares. La atención de Laura fue excepcional, siempre atenta a nuestro bienestar y con un trato cálido que hizo nuestra estancia aún más especial. Solo desearía que hubiera más opciones de comida en el lugar. ¡Definitivamente volveremos!